Cuando uno ama,
ama en todos los sentidos,
ama con todos los sentidos,
ama sinceramente
y nada pide del otro,
sólo quiere dar,
dar las alegrías,
acompañar en las tristezas,
dar con amor.
Cuando uno ama,
ama al otro por lo que es,
por lo que hace
y no quiere cambiarle
sino que sólo para bien.
El amor no duda del otro,
y no le limita sino que le incita a alcanzar aquello con lo que sueña,
pues los sueños están para luchar,
para hacerlos realidad.