Cargados de cansancio, estan mis ojos
de tanto ver ese retrato,
falto de aire mis pulmones
de tanto suspirar al querer pintarlo.
Al empuñar el pincel para pintar
hubo una quietud en el momento
tan solemne y sideral,
mi mente habia quedado
en blanco por completo.
Como si yo me hubiera ido lejos,
pero aun seguía ahí,
entre la mezcla de colores de mi paleta
mi vista se habia perdido,
para cuando volvi en mi
mi cuadro habia nacido
de los trazos inconscientes
de mis sentimientos coloreados
detras de esa red de garabatos
habia pintado tu retrato