Es el momento de decir adiós,
no porque no te quiera
te digo adiós porque te amo,
te amo con la fuerza del alma.
Es el momento de despedirme,
no porque no te quiera,
realmente eres dueña de mi alma,
eres dueña de mi ser.
Es el momento de morir y renacer
no porque te quiera olvidar,
porque vives en mí y de mi
nunca saldrás.
Es el momento de perder, y de vencer
sé que nunca serás mía,
sé que en esta vida me toca ceder
pero aunque pasen mil vidas,
mil existencias, mil mundos,
yo te seguiré al futuro, a tu tiempo y espacio
aunque no seas mía, yo seré siempre tuyo.