Gotas de lluvia que caen
leves sobre la muralla,
alambres retorcidos, quietos,
como techo la resguardan.
El patio vacío y solo,
¡para la tarde me aguarda!
después del escaso descanso
que cada día me llama.
La cama fría me espera
para descansar mi espalda...
pero mi mente no duerme;
piensa y a la vez trabaja.
Recopila tenuamente
todo cuanto aquí me pasa
en esta prisión, Sevilla uno...
Así es como la llaman.
Cuento y sumo los segundos,
los minutos cada tarde
echado sobre la almohada
de la cama, de la celda
que me apresa
desde que perdí tu mirada.
Sevilla, 18 de Enero de 2016
LA ISLA PERDIDA
Lentamente pasa el tiempo.
Los días se hacen eternos
y yo paso los minutos
jugando con los recuerdos
de las horas que pasamos
juntos en aquella isla,
que cambiamos falsamente
por una celda maldita.
Hoy escribo desde ella
para ti esta poesía,
deseoso y angustiado
por no verte vida mía.
Quisiera echar atrás
el momento de salida
y poder recuperar
aquella isla perdida.
Le pido a dios cada noche
que nos permita volver
a ese lugar en el mar
que de ti me enamoré.
Sevilla, 21 de Enero de 2016
VERSOS (para sobres de cartas)
I
Mis versos para tus ojos.
Mis gritos para tus oídos
y unos pétalos de rosa
para aromar esta carta amor mío.
II
Abre esta carta y escucha
la he llenado con mi voz
cada palabra expresada
sacada del corazón.
III
¡¡ Date prisa amigo !!
que esta carta escrito lleva
cuanto a mi amor yo le digo,
que mi corazón piensa.
IV
Desde Sevilla a tu hogar
hay un lento recorrido,
para que puedan llegar
las cartas que yo te escribo.
ERMANUÉ (c)