Querido niño Jesús:
Ante todo permíteme saludarte, deseando estés bien, con ganas de nacer y no hayas perdido la esperanza en la creaciòn. Debo pedirte que seas tù mismo quien traiga los regalos y no el gordito de gorrito rojo que mandas desde el Polo Norte, un tal Santa, pues el lleva sus trineos a Europa y Amèrica del Norte, cargados de juguetes sin sentimientos, pero no llega a África, Oceanìa, ni a la América del Sur, ni del Centro, donde campea una gran pobreza, y los niños mueren de inaniciòn, asì que, yo prefiero visites tù el corazòn del hombre y en los niños mantengas la ilusiòn y nos traigas tu luz, la Paz, la unión, la Alegrìa, la comida y la Salvaciòn para todos, tanto para los niños, como para los jóvenes o viejos, viajeros de la vida eterna, en el constante vagòn del ùltimo tren, donde estamos atrapados y sin salida.
¡Si! ya se lo que estas pensando, que soy de aquellos rezagados, y que hacia mucho, pero mucho tiempo, que mi corazòn de niña no te hablaba, ni te escribìa una carta, y tienes razòn; recuerdo que la ùltima vez que lo hice, te la dirigì cuando apenas contaba siete años, y te la enviè a mano con mi padre quien se encargò de matarme la ilusiòn, diciendo me, que supiera que el era el niño Jesús, quien por cierto se llamaba Jesùs y por lo tanto, se encargarìa de comprar los regalos a mis hermanos y a mi y que no pidiera mucho, jejeje!
Asì que le respodì, ¡Padre! si nunca pedìa demasiado, humildemente me conformaba con la muñeca de trapo o el horrible bebe de plástico con ojos de Chuky, era suficiente para sentirme feliz, entonces, le dije ¡Padre! estàs equivocado porque aunque me digas que tu compras los juguetes, y que el niño Jesús no existe, si existe! yo he soñado y jugado con èl en mis sueños muchas veces y es mi buen amigo.
Desde entonces no te escribìa enviàndote cartas, pero yo se que me escuchabas cuando te hablaba desde mi corazòn, ¿Te acuerdas cuando te pedì que me regresaras a vivir con mi madre y hermanos y me concediste el deseo, o cuando te pedì consuelo si estaba triste y siempre me lo diste? ¿o cuando te pedì no permitieras que mi abuela me obligara a matar otra gallina? y nunca mas ocurriò, gracias! se que fuiste tu.
Pero.... fueron pasando los años, estudiando, trabajando, todo fue pasando, crecì, envejecì y con el tiempo fui perdiendo mi fe, recuerdo que de niña hacíamos un pesebre, escondíamos tu figura y la colocábamos a la media noche, porque era tu nacimiento y te cantábamos el cumpleaños feliz, o las Mañanitas. ¡Ah! que lindo era, correr bajo la cama y encontrar una caja envuelta en regalo con un un gran lazo rosado ¡Cuanta felicidad!
Hasta que un dìa, vino una tìa, con un arbolillo plàstico y le dijo a mama, esto es lo que està de moda, no tienes que perder tanto tiempo armando el pesebre, que da mucho trabajo, a este solo le colocas unas luces, unas bolas de colores y ya, entonces, desde aquel dìa tu figura e ilusiòn dejo de brillar, y de ser lo mas importante, pasaste al desvàn.
Los regalos cuando los habìa, se colocaban al pie del árbol encendido. A mi me seguía dando ilusiòn ir a la iglesia del pueblo a cantar villancicos y jugar con otros niños en la plaza, que dìas antes en misas de aguinaldos habíamos conocido, patinando en la plaza del barrio, al frente de la iglesia y al despuntar la mañana comíamos pastelitos de queso o arepitas dulces con anís, y hasta bebíamos chocolate caliente.
¡Ah! cuantos recuerdos bellos ¡Gracias Niño Jesús! por hacerme recordar esta mañana, aquellos años felices, volar y volver a ser la niña que te ama y que vive oculta en este viejo corazòn, que bueno es, volver a sentir tu espìritu y no pasarme estos dìas triste y en soledad. Por lo que os convido a a compartir con los buenos amigos del portal y del cuartel, sus anécdotas y recuerdos, en esta navidad, deseándoles con todo cariño, alegrìa y felicidad,
Esperando que tu mi amado Niño, puedas tocar sus corazones, te lo pide con universal amor tu niña vieja y échame la bendiciòn, porque mis padres hace tiempo que se fueron al tren de la estaciòn y espero que estén disfrutando felices de tu cielo con amor.
Raquelinamor
Diciembre 16, 2017