Relato Ficticio Narrativo: ¿Gemelo, y qué, bah?
Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez Sánchez
Seudónimo: EMYZAG
En un llano lejano en el oriente medio se llamaba un pueblito “La Otra Cara del Sol”. Existían muchas cosas y leyendas entre ella una que me llamó la atención al visitar el pueblito. Un nacimiento doble de gemelos en el pueblo. Uno se llamaba Pedro y el otro Pablo. Al nacer los separó el destino. Pedro permanece en La Otra Cara del Sol y Pablo se muda hacia el occidente con un tío lejano. La leyenda cuenta así, “unos muchachos gemelos que al nacer fueron separados, y regresó Pablo “el ojo visor”, como le apodaban, y llega a La Otra Cara del Sol. Los dos por caminos tan distantes recorren por el lugar en La Otra Cara del Sol. Cuando la novia de Pedro lo vé se asombra es muy inmenso el parecido y le da un beso, nadie le había entregado un beso con tanta pasión, con tanto amor y con tantas ganas de amar. Llano abajo bajó por el acantilado y nunca se ven Pedro y Pablo. Él, sabe que es gemelo y los dos lo saben, siguen un juego entre todos en el pueblo. Engañan al pueblito por un tiempo. Pedro, buen mozo como Pablo, en La Otra Cara del Sol, hay fiesta, se casa Pedro con su novia. EL novio no llega a la ceremonia, la novia desesperada, ansiosa, inexistente, estrésica, con llanto en los ojos. Y vá entrando por la iglesia un hombre tan parecido a Pedro y sí, para todos era Pedro. Y nunca más se supo de Pablo hasta que en La Otra Cara del Sol, aparece Pablo mirando al sol y recordando aquél suceso cuando se fue a occidente con su tío. No se sabe si hubo dinero por debajo de la mesa. Sólo se sabe que nunca más fue igual el pueblito La Otra Cara del Sol sin Pedro y sí, con Pablo”.