Retorno sin buscar encontrar sombras pasadas, cansadas
en escenarios ahora vacíos, fríos, lugares recorridos, desaparecidos.
El barro fresco, por el recuerdo de viejas pisadas, miradas, puñaladas
no secadas con calor, condenadas solo con olvido, ido.
Con mucho ruido divagan desoladas, desechadas,
jamás escuchan lo de afuera, solo lo de adentro, descontento.
Superficiales y de miradas ocultas torvas enraizadas, fracasadas
egoístas, consejeros opinan desde lejos, pocos al centro correcto.
En sabiduría se convierten las pisadas, miradas, pinceladas.
son resultantes apogeos, de ebrios desaciertos, imperfectos,
tranquilidad en el alma noble por palabras acertadas, calladas.
Conciencia firme de carácter, pensamientos y movimientos.
DanielVC