Perozo rivero Miguel Oswaldo

Cochero de la lluvia

 

COCHERO DE LA LLUVIA.

 

                                                                                          

¡Oh  viento!,

 tu que peinas el cabello cristalino de la fuente,

Cochero misterioso donde viaja la Lluvia,

detén   tu paso quedo,

y al niño que pregunta, que pregunta y pregunta,

le narrarás sin prisa tu poema más bello,

le dirás que te llevas  los átomos del agua,

para sembrar de nubes farallones de cielo,

que la fragante aroma también viene contigo,

y la agreste fragancia que perfuma el paisaje,

el canto y el mugido..., la música salvaje,

la leve mariposa que cabalga en tu  olvido,

como si presintiera que es hermoso su traje;

detén tu  paso quedo,

y al niño que pregunta, que pregunta y pregunta,

le contarás del necio que te lanza, suicida,

la peste de unos gases,

el humo fratricida...,

y cuéntale también al niño de mi sueño,

que tú naciste libre,

que tú no tienes dueño,

¡Oh, Viento,

qué silencio más hondo tu distante presagio,

tu mensaje sin fecha y sin destinatario,

tu voz en lo profundo de la nada que inquieta,

perfil de vagabundo,

Posdata del Poeta...!