Las horas pasan y pasan
como un vagabundo herido por alguna desdicha
cada tic - tac logra aniquilar mi buen juicio
ya nada es igual desde que partiste
los amaneceres se levantan tristes
y los atardeceres lloran allá en el horizonte
la mala suerte de no vernos amarnos de nuevo
aquellas largas noches de deseos carnales
hoy solo son la sombra de un agridulce pasado
y las coloridas mariposas no aletean mas en nuestro jardín
pues yace ya marchito
ante la vista de tu indiferencia.