Caminando por la playa, pies descalzos
tu silueta, tu aroma, ese tú perfume,
tu cabello suelto, tus manos cálidas
tu risa picara entre besos robados
tu piel húmeda, suave y tierna
ese no se qué, que me enloquece
la ternura de tu voz que susurra,
me enamoras, me envuelves
en una aurora mágica.
Es la arena, la playa, las olas
son tus labios, tu lengua, tu alma
esas ganas, esos deseos de besarte
la locura de enredarme en tus brazos
de ser uno fundido en ti
de seguir tus pasos al alba
de calmar tu sed en el ocaso
de peinar tu cabello bajo la luna
de acariciar tu cuerpo junto al mar
de llenarme de ti, de tu brillo
de que seas mi mundo
y que unas mi mente, mi carne
en tu nombre, en tu espíritu.