Norberto Osvaldo Algarin

Nos, peregrinos

De temas de amor jovial hoy, mi traviesa Musa,

olímpica, os inquieren los exhaustos viajeros

que vienen de Micenas, de Egipto y Sirenusa...

Peregrinos, que en busca de amores hechiceros

 

vais por el globo aguzando jovial cornamusa,

o entonando rondeles, o paciendo corderos:

la Musa su secreto a confesar se rehúsa;

por lo tanto continuad vuestros pasos ligeros...

 

Cifrad la pingüe dicha en la mujer harmoniosa

macerada de ungüentos de mi amiga, la rosa,

y de testa adornada con el lauro del día.

 

Yo, en triunfal caravana de una carnestolenda,

entre medio del fango, voy surcando la senda

de la dicha perenne. ¡Afrodita es mi guía!