Mi rostro aquí siempre estará
desesperanzado por la llegada
de lo que nunca será.
Esperando el nacimiento de algo bello
lo vi nacer, lo note cuando se desvaneció
lento muy lento de tras del tiempo
Como pelusa que lleva el polvo
como torbellino de afirmación.
Así está el rastro esperado
contemplar lo que nunca será…
Desde la distancia tú aroma
deleita mis sentidos,
tu imagen me impacto
con tanta dulzura,
que la sostengo por un rato
hasta que pausadamente se desvanece.
Mis sentidos recorren el horizonte,
devuélveme físicamente el beso
que te robe con la mirada,
con el perfume de la noche
percibiendo lo que nunca será.
SUAVEMENTEASISERA
©Violeta