“Patios de silencio”
Patios de silencio, de flores marchitas
Que las seca el viento, con grandes lamentos
Y llantos sin risas, con ojos sangrientos
De lágrimas vivas, que penas no quitan.
Son recuerdos vivos, que llevan las almas
Sufriendo en sus cuerpos, y van a esos patios
Cubiertos de flores, llenos de siléncios
Para recórdarlas, y apagar sus llamas.
Cruces de granito, lápidas de mármol,
Allí están durmiendo después del calvario,
Descansando el cuerpo, cuál fiel relicario.
Ahí las riquezas de nada les válen,
Los ricos y pobres son todos iguales,
Todos son recuerdos, que quedó en la sangre.
Menesteo
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