Hay gente que te deja aquella impronta,
que hace que no olvides su mirada.
Hay gente que con solo verla un rato
se cuela en el alma tan profundo
que cambia los relojes y ata el tiempo.
Hay gente que te asombra cuando escribe
mostrando pedacitos de su alma.
Hay gente que descubre tras las sombras
la mágica linterna de los sueños
y pudiendo esconderlos, los regala.