¡Oh! Dios de los Cielos, me siento exhausta, cansada, me duele el cuerpo, en especial las caderas, ¡tantas han sido las horas montada sobre los lomos de este pobre asno! que tambièn ha de venir cansado por el largo camino andado, subiendo las empinadas cuestas, empero... parece que ya vamos llegando al pequeño poblado, le peguntarè a mi amado esposo José, quien camina adelante, guiando nuestro trayecto, ¿Esposo, cuanto falta? y se acerca para responderme: _ ¡Calma mujer! ya hemos llegado a Belèn, ahora a buscar una posada donde pasar la noche y luego veremos que hacer mañana temprano, recuerda debo ir para empadronarnos en el censo y cumplir el mandato del emperador Cesar Augusto.
_Y fue como José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén, por cuanto era de la casa y familia de David__
Asì que, comprendiendo bien sus palabras, hago silencio, pienso ¡Gracias Dios! el me da seguridad, no debo causarle màs inquietud, ¡Pobre! ¿Como habràn de dolerle sus pies? ... entonces en ese momento, ¡Ah! siento la criatura moverse fuertemente en mi interior, ¿Me estarà avisando que pronto serà el alumbramiento?, ¡No lo sè! colocarè mis manos en el vientre, sobarè un poco para sentir alivio, ¡Claro! no niego que me siento algo ansiosa, creo debe ser natural, es mi primer parto y solo he escuchado relatos de otras madres, acerca del gran dolor que se experimenta, pero siendo la voluntad de Dios, no debo preocuparme, serè obediente y paciente, cumplirè su sagrada voluntad, no importa cuanto dolor deba padecer mi fràgil cuerpo.
Hemos pasado algunas horas deambulando las calles, tocando puertas y no hemos encontrado albergue, comienza a caer la noche y el tiempo esta lloviznoso, pero Josè no encuentra lugar, pues muchos habitantes del reino, han tenido que trasladarse a sus lugares de origen a causa del censo y las posadas estàn llenas, pero, gracias a un amable señor compadecido por mi estado, nos ha ofrecido el establo de su vivienda para res guardarnos del frìo, y donde podamos pasar la noche.
Josè tan amoroso como siempre, hizo lo mejor que pudo, juntò suficiemte paja haciendo un còmodo lecho para mi descanso, pero no me siento bien, comienzan los dolores, observo cerca de nosotros que se encuentran una mula y un buey que nos miran con extrañeza, y gracias al calor de sus cuerpos el ambiente se siente càlido, no me quejarè para no ahuyentarlos, mientras tanto Josè prepara un pesebre, lo limpia y coloca cerca del lecho, es una pequeña caja de madera donde colocan el alimento a los animales del establo, pero, que ahora, servirà como cuna para cuando nazca nuestro niño.
Apenas traje conmigo una frasada de tela blanca y limpia en el morral, para cubrir su cuerpecito, asì que esperarè... Cierro los ojos, me entrego a la dulce espera, y se haga en mi según sea su divina voluntad, estoy feliz por haber sido la elegida entre todas las mujeres y honrada porque me fue dada tan grande bendiciòn, mi cuerpo servirà para que nazca el salvador del mundo y se cumpla la profecìa.
Casi es media noche, afuera puedo observar el resplandor de una gran estrella, seguramente serà para que los ángeles sepan adonde estamos y nos puedan acompañar. ¡Ay!, ay! ay! este portal se llena de luz, y un coro de àngeles cantaran esta noche es NOCHE BUENA y mañana Navidad. Marìa de Benchatù.
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Con amor para mis amados compañeros del portal, aprovecho para dejarles mis saludos de universal amor en esta NAVIDAD, deseàndoles pasen una linda Noche Buena y una FELIZ NAVIDAD, yo estarè atendiendo familiares que vendràn a visitarme, asì que estarè acompañada, gracias a Dios, ¡Los amo!
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Raquelinamor
Diciembre 23, 2017