y si no...
ya hiciste suficiente,
suficiente como para no irte nunca,
al menos de mi memoria,
como para no olvidar tu aroma
de inmaculadas rosas,
para arrastrarte conmigo hacia mi muerte,
esta muerte lenta y dolorosa,
despues de tu ausencia te vuelves inmortal,
empiezas desde el nucleo de mis entrañas,
y terminas en la luz que se refleja en mi mirada,
y si no...
¿a donde de vas?
que siempre te alcanzo,
¿en que lugares te pierdes?
que siempre te encuentro,
llegara el tiempo con su larga estela de olvido,
y seguiras apareciendo en mis sueños,
eso sera si no...
y si si...
tengo abierto el pecho,
la espalda,
y el alma,
para que te quedes de nuevo.