Cuando el viento sople
y tú; ya no respires el olor de mis letras
tal vez, ya esté lejos
sin la fragancia de ellas
Cuando el candil se apague
y tú; ya no veas mis letras
tal vez, se ha extinguido el aceite
sin luz para leerlas
Cuando el silencio llegue
y tú; ya no escuches mi voz
tal vez, ya estaré en mi sepulcro
sin amor, sin letras, ni voz…
-EPITAFIO-
Yace la mujer que escribía poesía...
para el amor; que nunca vio nacer
Mia Aragon.