No me enseñaste quererte así,
eso yo lo aprendí pero
lo que me enseñaste fue sufrir,
sé que no fue tu intención pero
para eso tu eres la mejor.
Pensaba sentir ángeles después de que te perdí,
pero me di cuenta que la vida no se acaba ahí.
Me sentía muerto sin una razón de ser,
pero me equivoque ya la vida no se
me acabara aunque no estés.
Noches de soledad tuve en tu ausencia
y días de miseria pase sin ti,
pero me di cuenta que la
vida no se acaba ahí.
Conocí que es sufrir,
es el sentimiento
que nadie desea sentir
y vivir. Pero algo
aprendí,
que después de todo
eso uno puede seguir y vivir.
Hasta que la conocí,
ahora ella cambio el significado
de mi existir,
mi razón para vivir
y mi escusa para sentir.
Apareció cuando muerto
me sentí, muerto del alma y del vivir.