Nuestras miradas cálidas se cazan
Nuestros semblantes se acercan, se gozan
Las narices se examinan, se rozan
Los alientos ya se funden, se enlazan
Los ojos de ensueño suave se cierran
Los pechos se estrujan, presionan ávidos
Los cuerpos se sacuden impávidos
Los brazos entrelazados se cierran
La respiración se agita cohibida
Los corazones palpitan afables
La lengua se estimula prohibida,
Los labios se fusionan insaciables
La boca se une con la otra cohibida
en besos de amor inconmensurables.