I
Al vislumbrar el amanecer
Para mí es un placer
Buscar de tu presencia
Amado y eterno Jesucristo
Tú eres la esencia divina
Que nutre mis esperanzas
Esperanzas que crecen cada día
Porque tengo la fe y la certeza
Que para ti no hay imposible
Porque tú eres invencible
El que le da nombre a quien no tiene
El que cuida, protege y el que dirige
A toda mi existencia
II
Cuando los problemas
Llaman a mi puerta
En ti encuentro la fortaleza
Que es única, eterna y eficaz
Que me ayuda a proseguir
Porque tú le das a mí existir
La tranquilidad que necesita mi alma
Tu amor le da completa calma
A mi corazón angustiado
Porque tú eres el bálsamo
Que cura todas mis heridas
Transformando en valentía
Todos mis temores
III
La paz que tú me das
No la compra el dinero
Ni conoce de lindero
Porque sobrepasa todo entendimiento
Porque tú eres el sustento
De su presencia divina
Dulce, preciosa y cristalina
Que trasforma mis tristezas en alegrías
Alegrías que son verdaderas
Porque tu poder es el que llena
A mi vida de tu unción
Y puedo decir a viva voz
Que tú eres el dueño de mi existencia
ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAÚL-VENEZUELA
07/01/2.018
05:50 a.m