De acuerdo no beberé,
no seguiré la moda,
ignoraré las invitaciones,
leeré lo que aún no he leído,
no comeré sin sentido,
no camviré de vestido,
no temeré a Dios,
ni al vacío.
Si acaso temeré a Cupido,
no ordenaré mis libros,
pero que alguien me diga, por caridad,
¿De quien soy hijo?¿O de qué?
¿Del oscuro destino?
¿De un azar?
¿De un accidente?
¿O