Carlos Bongianino

Otro día de tu mano.

Luego después de despertar 
de lo que fue otro día de tu mano
dando besos inspirados por el ayer
consuelos que hacen falta y no se dan 
en esta aparente realidad que busco callar
con sueños donde pueda pasar
otro día de tu mano
Con tu estupida cara que domina mis latires 
y ahuyenta mis deidades que se vuelven efímeras pelusas que revolotear cerca de tus pestañas
Y disfruto de la mentira de otro dia de tu mano 
porque nos encontramos y si no nos besamos nos golpeamos 
Es que quien entiende el amor enloqueció 
y el que no acepta el adiós imita los pensamientos del que no escucha sus anhelos ligeros
Me gusta soñarte con tus dudas 
Soy un travieso infante y tu fuego brillante, 
juntos no hay pared que aguante ni metofaras errantes
sobre lo que para mi es
otro día de tu mano.