No se puede jamás hallar la forma,
de las damas, calmar sus ansiedades,
y por eso utilizo yo la forma
de decirles mentiras y verdades.
La mujer es el centro de mi mundo,
de manera sublime la venero,
y le entrego mi beso mas profundo
pues pasión ilumina mi sendero.
Yo me porto con ellas muy galante
y me llenan de dicha y de placeres,
he nacido con suerte y gran talante
y por eso seduzco a las mujeres.
No pretendo igualarme a Casanova,
ni tampoco a Rodolfo Valentino,
mas disfruto de amor su dulce trova
sin promesas que cambien mi destino.
Considero que amar es lo mas bello,
sin las reglas que imponen los beatos,
a su luz se le goza su destello
y se viven sus rayos sin recatos!!
Autor: Aníbal Rodríguez.