La silueta de una hoja pálida
que irrumpe la suavidad de un agua reposada
en la mirada de aquel primer día.
Una lluvia me detiene
ante la insistencia de estar acompañada
y en tiempos de incertidumbre
son las gotas de esta lluvia,
la que me generan calma.
Son tus ojos,
Son tus manos,
Son esas palabras,
algunas primeras cosas
que admiran mi pesadumbre; fría y amargada.