Te encontré dormida, con los ojos abiertos
- ojos agrestes como piras encendidas -
soñando en voz alta con los brazos extendidos
sueños de mar buscando la orilla
sueños de sol escudriñando sus mundos
< lágrimas resplandecientes en las mejillas del tiempo >
Te encontré cantando bajo un árbol de hojas rojas
esperando que de tu himno germinen raíces, pájaros y flores
Te encontré frotando la piedra contra el viento
aguardando que brote la chispa de la palabra altiva
que la noche nos llame por nuestro nombre
para contarnos que somos fruto del mismo tallo
tratando de encontrar la palabra perdida
Te encontré recordando lo que dice la luna y la marea,
mirando las piedras donde nacen los caminos
donde la alborada y la tarde se acarician complacientes
como una hembra y su amante enamorados
A tu alrededor sólo hay polvo
- huellas de pies desnudos sobre espinas –
sólo víboras que relumbran
reptando en la noche de los siglos