Versos con mucha nostalgia
De un triste y grato recuerdo
De la vecina de enfrente
Que dejó una mañana
Entreabierta su ventana
Para que pueda observar
En todo su esplendor
La belleza que irradiaba
Su cuerpo al amanecer
Mi embeleso fue mayor
Que cuando tuve frente a mí
La divina Venus de Milo
No era bloques de mármol
Era todo piel de sueños
Ofreciéndose a mis ojos
Llenando de fantasías
Mi mente, por un futuro
Envuelto entre sus brazos
Modelando con mis manos
Esa fenomenal escultura
Que envidiaría Alexandros
Y siglos hubiera dado
De su vida de artista
Para quedar extasiado
Frente a tamaña hermosura
Dejó de ser una visión fugaz
Se hizo cruel la realidad
De no poder alcanzar
Ni apagar mis fantasías
Se hicieron noche los días
Las noches fueron de insomnio
Esperando amanecer
Y así fue pasando el tiempo
Sin una nueva ocasión
Hasta que pude entender
Que la ventana entreabierta
Fue un hecho sólo fortuito
Y mi certeza... una ilusión !