He conocido hermosa chiquitita,
Que semeja fugaz rayo de sol,
Siempre alumbrando débil corazón,
Oculta en mi interior como perlita;
Como una dulce y frágil florecita,
Es la auténtica dueña de mi amor,
Sin su fragante aroma nada soy:
-En tus manos me tienes, princesita-
Te entrego pequeñita, mi cariño,
Porque sólo a tu lado soy feliz;
Mi único anhelo fue el de ser cautivo
Y en tus albos abrazos me rendí;
Hoy por doquier que vas, estoy contigo
Y si algo no quiero es verte partir...