Quieres llorar, tú sabes que quieres llorar
De repente sientes una rabiosa tormenta que a tus ojos ahoga
Entonces, el océano de tu alma se desborda en tu bajo mirar
Y con impotencia en tu corazón, empiezas a llorar
Observas rápidamente a tu alrededor, pero sólo puedes ver tu interior
E intentas calmarte, pero tu pecho libera secuenciales sollozos
Y no sabes lo que sientes, no lo comprendes, ni siquiera te importa
Lo único que haces en ese momento, es empezar a llorar
Y te sientes como un tonto, te sientes como un idiota
Pues sabes que a la postre, llorar no soluciona nada
Pero en tú interior, no puedes contenerte
Y así, con una rabia muy intensa, tu llanto no has de calmar
Después de unos minutos, comienzas a pensar en los tuyos
Tu familia tus amigos, y también la ves a ella
Y ves sus ojos, y en sus ojos tus ojos, y en los tuyos los de ella
La rabia ahora es tristeza, el llanto es igual
Pero las gotas que antes con sudor bien podrían confundirse
Ahora se tornan cristalinas
Y ella…
Aunque siempre está presente, incluso en éste momento
Te preguntas entonces el por qué de su ausencia
Y tontamente
En lugar de actuar
Simplemente
Lloras.