RECUERDOS
En horas tristes; cuando existe el llanto;
también horas de ternura llenas,
llevo amor mío, tu recuerdo santo,
único alivio de mis mudas penas.
Vaga mi alma con tu amor presente;
siempre el recuerdo de tu vida llevo
como una llama del cariño ardiente
por el que sufro y por el cual me muevo.
Yo te recuerdo cuando estás ausente;
cuánto te quiero lo sabrás un día
cuando sintamos el amor naciente
que a nuestras almas llene de alegría.
Yo sólo sufro por tu amor, mi vida;
confío en tí mi perpetuado anhelo
y mi alma toda junto a tí dormida
buscó un cariño y encontró el consuelo.
Carlos Zuluaga