Quiero decirte que es lo que siento,
Pero sé que no entenderás...
He decidido dejárselo al tiempo,
Y saber que esto también pasará...
Sin embargo quiero que sepas,
Que si un día me has de olvidar,
Y, aunque, lejana te lleve el viento,
Nunca te he dejado de amar...
Que sepas que en las mañanas,
Eres mi motivo al andar,
Que me emociona ver en tu rostro,
Los pasos de tu alma al caminar...
Que en las tardes, doradas y calurosas,
Me visto raro y caprichoso al buscarte,
Que busco la melodía mas sonora,
Que me permita fantasioso tocarte...
Que con el fin de vislumbrarte mi vida,
Cada que paso cerca a tus ojos,
Sólo busco en pleno enamorarte al día,
Y me entiendas tan solo un poco...
Que al andar de tu mano en la calle,
Me muestras un camino de paz,
Y en tu sonrisa tan dulce reparo,
Al sentirte tan cerca y soñar...
Pidiendo que me mires poco a poco,
Y que sin prisa yo me haga notar,
Aunque sea en el rabillo en tus ojos,
Pero que me mires con libertad...
Con libertad de sentir y tocar,
Lo mas puro que existe en la vida,
Que aceptes y expreses en días,
Aquello que por las noches suspiras...
Y entonces volver a empezar,
Sin candados ni rocas pesadas...
Y entonces volver a soñar,
Que en la vida puedes ser bien amada...
Que sepas todo esto mi vida
Y que no hagas caso a temores...
Que sepas te espero en las vías,
De un tren que no guarda rencores...
Que el viaje aun es largo hoy en día,
Pero que si me tomas de la mano,
Puede ser la mas dulce estadía...
Pues si prefieres andar junto a mi,
Prometo ser fiel compañero,
De noches soñadas y gratas poesías...
De grandes amores y sinceros abrazos,
De sueños ligeros, aunque bien cargados,
De cariño completo, de amor y respeto...
De viajes en tren sin regreso...