A todo evento individual,
la gente tiene el derecho,
de acudir a un tribunal,
a los fines de defender
su integridad personal.
Es un fuero permanente,
que debe reivindicar,
con un debido proceso,
que le debe garantizar,
la justicia nacional.
Conquista fundamental,
para todos por igual,
irrenunciable además,
en la diversidad legal.
Y si un país no honra,
el valor de este derecho;
niega la democracia,
y conculca su contexto.
En tanto es menester,
estar presto a defender,
ante cualquier juzgado,
los derechos violados.
Es una lucha legítima,
que no hay que aflojar,
porque si no te vejaran,
hasta tu vida, aniquilar.