La noche hoy se rompe
con su dulce y fresca alborada.
Nos trae sus trinos, aromas,
su bello astro que engalana.
Hoy, no hay hojíta sin rama
y, quisiera fantasear y, soñar.
Soñar despierta y lúcida
y ver en, como amanecerá.
Las aves hoy no se escuchan
y las flores no regresan.
No hay cantos ni murmullos,
se ven lindas las estrellas.
Pero hoy se escuchan pasos
en esta alborada bendita.
Son movimientos, pisadas
en esta fresca amanecida.
¡Parece qué va deprisa ...
en esta madrugada serena!
¿Qué será y, a donde irá
corriendo con su pena?
Abro la ventana y siento
qué estoy viva en esta alborada,
qué me avivó un ensueño ..
qué me seduce enamorada.
Las aves van despertando
en esta hermosa amanecida.
Se escucha .. algún silbar,
gente sorpresiva.
Bella aurora romántica
de aires frescos evocadóres
qué me recuerdan tus lindos besos,
tu calidez y los albores.
¡Y, por qué no decirte qué te amo
en esta vida de soledad!
Autora
María Luisa