Paulatina fenece
vorágine vacía de sentimientos
hurga tragedias
Llegan las 12 de mediodía
en Palacio sirven a la carta
mientras
lánguidas humanidades escudriñan horizontes
inciertas
las familias padecen ausencias
sonámbula
la muchedumbre deambula
va dejando agónicas huellas
Repica la sirena
continuación de faena
silencioso el hombre vuelve
intenta otro final
impera otro deseo
acumulado
indigna