La vida pasa
y todo cambia
mi sol brilla
y me ilumina
llevándome más allá
de lo que mi mente imagina.
Esperando continúo
a que mi corazón no sea duro
y responda de una vez
aquello que insinúo.
Le pido que esta vez
no me ande con rodeos
que sea puntual y exacto
y me diga lo que siento.
El agua y el aceite
en mi cuerpo no cooperan
uno me dice que no
y el otro me pone a prueba.
El escribir un poema
me hace demasiado mal
porque ésto que siento
me mata cada día mas.
Yo ya entendí
que muriendo viviré
porque ya he muerto amando
consiguiendo así vivir.
Pero una mente tapada
no funciona sin error
si en el fondo de tu pecho
el corazón grita de amor.
Alma, vida y corazón
te ofrezco todo el tiempo,
mente y cuerpo ya no puedo
porque no te están sintiendo.
Tengo miedo de mi mente
porque actúa por mi cuerpo
y ella lentamente
va planeando mi sepulcro.
Al mar como un altar
yo me voy dirigiendo
llevando en mis manos
un anillo de plata
y mi ultimo aliento.