Camino ausente,
alzo los ojos a lo lejos
y me pregunto una vez más
¿dónde han quedado mis sueños?
Desperté, de pronto
yo no sabía que aun dormía
ya mi cabello estaba gris,
y no encontraba mi vida.
No puedo recordar,
en que lugar crucé la línea
que arrastró hasta mí la edad
si solo ayer era una niña.
Como podré avanzar
si ahora me siento tan vacía,
el tiempo me ha vuelto a ganar
y así enterrar mi fantasía.
La brisa me arrulla,
su tacto calma toda mi ansiedad
lo que me queda por andar
es como arena que arrastra el mar.
Lejanos recuerdos,
llenan mi mente de colores
y si mi noche ha de llegar,
me dormiré entre sus brotes.