Hablé con un hombre anciano y solo
escuche de el amargura y desengaño.
Por tus palabra hombre anciano,
es fácil comprender que has sufrido
mucho a lo largo de tu vida.
Por eso hoy te digo, procura disfrutar de
las cosas más sencillas. No piense en el pasado
arranca de tu alma la amargura y la tristeza.
Aprende de la flores del campo, ellas tienen vida corta
pero a cambio a todos el que la mira le regala sus colores,
su aroma, lo hace feliz.
Fíjate en el traje de las aves, ¡qué colores y que armonía!
En esos lirios del campo que la brisa suave mece.
En la risa de un pequeño.
Ese cielo que ves a través de tu
ventana que en la distancia
pareciera tocar el mar.
¿No crees? Que ha pesar que la vida
no te ha hecho muy feliz, hay cosas
sencillas que a diario vemos, pero
que poquitas veces, las sabemos apreciar.