Rerumnovarumcupidus

Soneto siguiente

Te sigo, porque tu aroma me llama
 Porque el viento me dice tu nombre
 Porque está escrito: para la mujer el hombre
 Porque es mi alma la que arde en tu llama.

 Porque mi corazón traza un rumbo cierto
 Porque mis ojos vierten causes en tu ausencia
 Y esa rosa alada mis velas inflama
 Para arrancarme de estas islas del desconcierto.

 Te sigo porque tu nombre está grabado en mi signo
 Te sigo porque tu amor es mi único camino
 Y porque en amarte encuentro un verdadero aliento.

 Te encuentro en cada siglo,  en cada astro
 En cada creación sublime de Natura, te adivino
 Te amo porque es mi más sagrado alimento.