Absorto, sentado sobre una roca
contemplando la gran luna, reinando
junto a las estrellas, iluminando
el extendido valle, tan barroca,
tan sofisticada que; tanto asombra
que pálida apenas si alumbra al mundo.
Se arrastran criaturas del inframundo.
Se refugia la sombra entre la sombra.
Las mujeres de la noche se excitan.
Estimula que infieles se apasionen.
Los míseros sin techo se marchitan.
Las caras de la humanidad se exponen.
Los horrores de las almas crepitan.
El orco abre, los demonios disponen.
Roselix55
Rosendo Elías Xolocotzin Ramírez
Cuernavaca Morelos 3 de febrero de 2018