alupego (Ángel L. Pérez)

TRAMPAS SON

En el camino un desliz.

Va desgranando las notas.

La sonata,

son tres notas.

Y la voz,

miles de notas,

que denotan el sentir.

Cada gesto,

es un dolor.

O un sutil manifiesto,

que refleja el corazón.

Habitan en el rincón.

Aliento de los amores.

Nacen flores.

Y al nacer de las cenizas.

Rescoldos son los dolores.

Promesas que se cultivan,

con deseos y temores.

Ronda la abeja la flor.

Va libando el corazón.

De corazones henchida.

Sin rencor,

va dando vida.

Zumbando su voz prodiga.

Avisos a la razón.

Vuelve alerta el corazón,

a corromper las razones.

La red que tejen sus goces.

Trampas son.

Como leones.

Soles que alumbran sin Sol.

Luciérnagas de colores,

en las redes sin color.

Ruge el león.

Tiembla la Naturaleza.

Y el Sol, rinde la cabeza.

Dando luz,

a un mal menor.

Semblante recio,

y constante.

Reflejos impertinentes.

Leves rictus de rencor.

Desafiante.

En su mirada un resquicio.

Albergue de una emoción.

Adormecida sin brillo.

Latente grito sin voz.