Nicolas Ferreira Lamaita

UNA CARTA

 

Montevideo diciembre 12 de 2017.

Amor mio:
Si aun te nombro así es por que así te siento

Como te has de dar cuenta he leído tu nota de despedida.

quiero sepas que no será nada fácil olvidarte,
igual como a veces no se olvida, el paso de una brisa de un aroma,

un perfume, pronunciar una frase sin quererlo con tu nombre,

o el pasar por un lugar que te recuerde.
A mi me quedara de amarte, la dulzura,

sin despecho ni rencores, sin ofensas.
A ti te dejo mis ruegos, mi sufrir, mis sentimientos e ilusiones como prenda.
Quiero sepas, para tu tranquilidad, pues se de tus nobles sentimientos,

que también yo, buscare el amor otra pareja,
otro amor eterno, otra promesa, que la vida, no termina solo empieza.
Sabe, que cada beso, cada abrazo, cada caricia, recibida cada palabra,

sincera que hubo entre nosotros, ¡tuvo vida!.
me preparo para que yo logre amar de nuevo

y no amar por despecho, por el hoy que a muerto.

amar por siempre y para siempre,

aunque en este momento parezca imposible ser logrado.
Se que vendrán momentos en que sólo recordaré tu nombre
y hasta llegue ha valorar el tiempo que perdiste conmigo.
Que no tendré problema en hablar de ti a quien en un futuro esté a mi lado,

que no  tu persona con el despecho que causa el rechazo,

diré con nobleza que aun te quiero y aprecio,

que sigo pensando en ti, porque a tu lado, aprendí a madurar,

me preparaste para una nueva esperanza,
porque aprendí ha querer más que nunca,

por que me hiciste fuerte, sólido, para amar de nuevo.
Solo espero hagas lo mismo, y sonrías al recordarme

y hasta en algún momento absurdo de tu vida, puedas extrañar mi voz,

mis pareceres, mis arrebatos, delirios y entusiasmo,

mi frenesí, la vehemencia con que te ame,

los cientos, miles de pretextos para llenarte de besos,

de abrazos cuando compartimos el amor.
Puede ser que juntos en la distancia riamos de los proyectos,

sueños ambiciones y locas utopías, fantasías.
Nunca podre olvidar nuestra historia,

por que no soy de los que olvidan su ayer
Para tu vida futura, mis mejores y sinceros deseos,

puede ser que un día nos crucemos, ¡No se!, en un parque,

un cine, un teatro, tu del brazo de nueva pareja y yo igual
y ambos tratando de esconder nuestros rostros tras la nada,
nos dediquemos una cómplice sonrisa, en homenaje a lo que pudo ser.

Siempre tuyo en el buen recuerdo.

Adiós.