Primero…
Recordar tu abrazo,
la fortaleza y ternura
que entregas abrazando.
¿Cómo será tenerte?
Segundo…
Mirarme en tus ojos
de color alucinante y perderme
en sus iris como en un paraíso imaginario.
¿Cómo debiera mirarte?
Tercero…
Anhelar tu sonrisa impecable,
el dulzor de tu cara cuando sin esfuerzo,
te muestras sublime y amable.
¿Cómo será sentirte?
Cuarto…
Desear tus manos adorables,
ese roce sutil y suave
que erizó mi piel al instante.
¿Cómo será tocarte?
Quinto…
Extrañarte a diario.
cuando el día amanece
y lo apaga la parca noche.
¿Cómo será despertar a tu lado?
Sexto…
Imaginarte apasionado
en escondidos rincones donde
decirnos, besarnos, tocarnos,
hasta dormirnos de amor agotados.
¿Cómo podría entregarme?
Mi amor...
Los cuatro mandatos restantes,
para mí, en secreto los guardo.
Me ruborizo yo misma, tan sólo
de saber lo mucho que callo.
Pilar González Navarro
Febrero 2018