Entre una gran tormenta apenas se lograba escuchar los fuertes golpes propinados a la puerta principal de la casa, eran fuerzas militares desplegadas en todas las calles en busca de gente alzada contra el gobierno de turno. Eran tiempos difíciles en el paìs azotado bajo un regimen militar.
Linda sale de su habitaciòn y toca la puerta de la habitaciòn de su mamà.
-Corre mamà, avisale a mi hermana y a su marido, deben esconder la maquina de escribir y toda la papeleria, o nos veremos involucrados todos en sus actos revolucionarios, que no prendan las luces para no llamar la atenciòn, a ver si la guardia deja de tocar la puerta y solo se van, y por favor que todos hagan silencio.
En ese instante la puerta principal vibra a punto de ser abatida, y finalmente bajo un gran estruendo cede la cerradura y vuelan el pasador, y varias botas militares pasan sobre la puerta derribada y entran en tropel varios uniformados, y al grito de alerta reventaron puertas y ventanas de las habitaciones, violentando la privacidad de la vivienda unifamiliar.
-Todos salgan al patio, vamos a revisar toda la casa, tenemos informes que aqui se realizan reuniones para conspirar contra del gobierno, además imprimen folletos contra el sistema y lo distribuyen en toda la zona central del paìs, entreguen toda la papeleria y no les pasara nada.
Mientras tanto los niños lloraban asustados sin entender lo que ocurría, Josè logro esconder los folletos en lugar seguro, sin embargo lo llevaron arrestado alegando ser sospechoso de promover protestas y actos subversivos contra el regimen.
-Linda he intentando convencer a tu hermana de que no es bueno que visite a su esposo en la carcel por ahora, podrìan dejarla presa bajo cualquier pretecto, en este momento no hay garantìas para los ciudadanos.
-Mamà por favor mantente al margen de todo esto, es el padre de sus hijos y nadie la va convencer de eso, no lo puede abandonar a su suerte, hay muchos desaparecidos, y si ven que no lo visitan pues podrìa sucederle lo peor, ten confianza en que esto se resolvera de alguna manera.
-Y pensar que eramos felices y no lo sabiamos, yo vote por el y ahora me siento culpable del mayor desastre que le ha podido ocurrir al paìs.
-Ya no vale pensar en lo que hicimos, mas bien deberiamos pensar en lo que vamos hacer de ahora en adelante, no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista, ademas estoy pendiente de que los niños concluyan sus estudios es lo ùnico que hoy por hoy podemos darle.
-Linda, la niña te ha dicho que pretende no ir mas al liceo y en su lugar hacer un curso intensivo administrativo, le dije que hablara contigo.
-Si ya lo se, y le dije que estudie lo que quiera, pero que no deje de estudiar o lo pasarà muy mal, en especial en esta situaciòn que actualmente vivimos, la verdad no tengo cabeza en este momento para llevarle la contraria, yo se que no quiere ir mas al liceo por el asunto aquel de la formaciòn militar, ya veremos en que para todo esto...
y la vida continùa ...
y la vida continùa ...