En el embravecido mar hoy habita una creciente oscuridad
Trae el viento un oscuro pesar acompañado de una insólita amargura.
Ya no hay flores en los herbosos pastos,ni sonrisas por las que llorar. Solo un silencio que clama:¡Tempestad!
Las nubes se visten con un manto sombrío.
Las ventanas están ya cerradas, él ha llegado;
se han ido los amores de las tardes de estío.
¡El arribo del invierno ha comenzado!
Aún fue ayer,cuando te bajo una agradable brisa marina nos besamos.
Mientras contemplábamos nuestro reflejo en el primigenio espejo....¡Oh, eras tu mi acompañante! ¿Quién mejor que tú me podría acompañar? Eras tu, mi querida amiga,mi dulce soledad.