Madre, has abandonado el nido
donde viviste, donde pariste
y amaste en tu paso por la vida.
Cambiaste de traje, te pusiste alas
para llegar al cielo presumiendo galas
con tu espíritu renovado y perfecto.
Hoy hay fiesta en el cielo, Madre
honores de perdón y tu graduación
MAGNA CUM LAUDEN, porque
sufriendo, aprendiste a vivir.