El Hombre de la Rosa

¡¡¡ EL TÁRTARO DE LA TIERRA ES EL NÚCLEO !!!

 

 

¡¡¡ EL TÁRTARO DE LA TIERRA ES EL NÚCLEO !!!

 

*** Versos de la Rosa***

 

La miseria del taimado completa su vínculo con Satán

cuando la vista del fuego asoma en tierras del mortal,

herida con sombra negra siembra con alba la mañana

esparciendo las sombras aceradas de soledad y pavor,

la iniquidad está manifiesta en lo inicuo de tu entorno

 como ese frunce maligno de sus custodios del Tártaro,

cuando esta maldad brota desde el centro de la Tierra

ese puesto del hombre se carboniza sin más lágrimas.

 

Mi vieja alma me dice el oído que el tártaro es la Tierra

donde vive el humano erigido por su Creador del barro,

donde la pureza del hombre sabe crear el Paraíso suyo

dejas tu barbarie para que la purifique la lava ardiente,

crudo núcleo ferroso derretido que equilibra al planeta

 arropándole con ese su magnetismo de violencia solar,

mientras el auténtico Tártaro se burla del planeta azul

que ha dejado esa profecía de la Cruz para redimirnos.

 

Quienes sean inmolados en un fuego de la purificación

dejan ocultos los dineros sisados a la pobreza humana,

en ultrajarle la inmensa misericordia de los desvalidos

se transforma en machos cabríos de su puerta maldita,

cuanto tiempo falta para que esa injusticia sea justicia

cuanta anhelo vano precisa esta ley mezquina del juez,

cuando van al tártaro su mal hacer de los predicadores

con falsos profetas que se guarnecen detrás del Cristo.

 

Todo Tártaro terreno es el destino de esa roja sombra

 cuando juegas con la hambruna y la sed de un pueblo,

sus herederos de justicia poderosa queman tu maldad

cuando privados con poder del oro ardan eternamente,

sombra de suerte yerma abruma las arrugas del poeta

por la falta de amor que necesita la falta de esperanza,

cuando todo es mudo por la miseria que irradia el caos

sobraran esas palabras que riman lágrimas del averno.

 

Vivimos sobre esas placas frías de esencia piroplástica

 que se mueven con esa soberana eternidad del tiempo,

placas que emergen después de derretir su civilización

placas que se sumergen arrastrando sus casas y cosas,

núcleo férreo que magnetiza el caos controlando al Sol

cuando el hombre reflexione parando esa locura social,

porque en esta esfera hay que aprender a ser Universo

volviendo al regazo estelar porque somos los vástagos.

 

Autor:

Críspulo Cortés Cortés

El Hombre de la Rosa

8 de febrero del 2018