rosamaritza

RELATO -PARTE 6-

 

Una diminuta lluvia constante, se evapora antes de llegar al asfalto tras un calor sofocante.  Aquel dìa rompe totalmente con la rutina, las maquinas estan en silencio, y las mesas de trabajo las envuelve el vaciò invisible de sus hojas en blanco.  Ambos se quedan sin palabras ante crudas revelaciones, surge un grito entre sentimientos encontrados, y estalla un fuerte aguacero con la fuerza de un huracàn, corre el agua entre el techo de caña amarga del patio trasero de aquella casa, y un àrbol ve caer sus hojas que lloran y se deslizan con rapidez entre un jardìn a punto de colapsar inundado y desbordado hasta la propia raíz de su nacimiento.

-Maldita sea!, ¿acaso te has vuelto loca?, dime, cuando, como, donde, y quien es èl

-Olvidalo, no te dare detalles

-Entonces mejor es que desaparezcas de mi vista cuanto antes, o no se de lo que serìa capaz

-Que es lo que te molesta mas, que se quebrante la relaciòn de pareja o de trabajo, creo es lo segundo, es lo ùnico que realmente siempre te ha preocupado. Siempre has tenido todo bajo control, y este es el momento que mas necesitas controlarte. Por los momentos creo que lo mejor es marcharme mientras se calman los animos, estare provisionalmente en casa de mi madre, por favor lleva los niños alla en cuanto despierten, ya hablare con ellos.

-Si, estan durmiendo no los despiertes y quizas quisiste decir nuestros hijos porque son mios tambièn, y aqui decido yo lo que se harà en adelante.

-Te equivocas, ¿ahora si son tus hijos?, antes jamas les prestaste a ellos o a mi la menor atenciòn, ni siquiera lo pienses ni lo intentes, es ahi cuando te daras cuenta de lo que soy capaz.  Tampoco quiero verte, y como es aqui donde se encuentra el negocio que nos provee el sustento familiar, a partir de mañana seràs tu quien tendrà la responsabilidad de hacerse cargo del mismo, de tal manera que lo mas facil es que mis hijos y yo nos ubiquemos en otro lugar, repito por lo pronto serà en casa de mi madre 

Decide caminar un largo trayecto bajo la lluvia incesante, entra en un cafè y espera que escampe, piensa en lo que acaba de ocurrir y siente que su vida esta en cero no atina a pensar ni coordinar las ideas.  Luego de un par de horas la lluvia ceso, y continuo su camino entre el olor a tierra mojada, cruza la avenida y atraviesa la plaza, observa un par de minutos la iglesia que visitaba con su abuela siendo ella apenas una niña, y le parecio escuchar su voz como tantas otras veces, (-mi niña, en la vida no hay problema sin soluciòn, y recuerda todo pasa por alguna razòn, las experiencias nos dejan enseñanzas.

Lila se encuentra distraida, cortando unas ramas que sobresalen de la jardinera, mientras el humo del cigarrillo la ahoga, y entre una tos que identifica al fumador se levanta y ve con asombro a Linda en la puerta principal de la casa, toda empapada por el reciente aguacero.

-¿Linda que haces aquì a estas horas, acaso caminaste bajo ese torrente de agua?, mirate hija toda mojada, ¿que paso?

Entre un llanto incontenible su voz se ahogo, y Linda la abrazo diciendo,

-Calma ya me contaras todo, primero cambia tus ropas y toma un tè...

 

y la vida continùa ...