salgomanzano

Cosecha de racimos

Aunque la prisión me oprima el sentir

-a distraer los pensares a orillas

del río ,oyendo murmullos del agua,

va mi mente metida entre las dudas-,

siento que la vida me glorifica,

mi voz sale a decir ansias del YO

-el andar refulge, el vivir se va-,

que mi corazón caliente se quema,

ardiendo en la fragua de los rubores,

y tengo el fragante olor del vivir,

el agua de mis ojos derretidos:

que no viene la entrega de los míos.

Viene la llama de tus manos rosas

a la piel morena de mi tiempo ido,

tiene tu brasa de aliento mi boca,

tiene mi cuerpo tu ventana abierta:

entraré esencias de mi lluvia blanca

-y gritarás de dicha estremecida...-

...........

Cosecho racimos, que no sarmientos.

Apilo ilusiones veinteañeras.

De la luna, caracoles de río.

Recojo de amor unos besos tiernos.

No trillo escarcha ni odios de olvido

y en mis venas azules creo, creo

-tus labios son míos: se aman de fe,

tumbados a la sombra de un alisio,

oyendo el dulce son de un caramillo-.

Tus labios y los míos consumidos

se vierten  ansiosamente  mordidos

en la alcoba de la consumación

-jadeos, gritos, aroman la unión-.

        -salvador-