El Hombre de la Rosa

¡¡¡ LA IRA DEL MAR Y EL FARO !!!

 

 

¡¡¡ LA IRA DEL MAR Y EL FARO !!!

 

*** Versos de la Rosa ***

 

Soy un temporal que embravece su poderosa agua

que azota un faro de ardorosa soberbia impetuosa,

perdona hermana isla que soportas ese airoso faro

cuando el potente viento espolea el furor de su ola,

cubriendo un fanal que ilumina al pescador perdido

porque Neptuno moja su suspirar airado de la roca.

 

El faro se mantiene erguido aunque le cubra la ola

empapando de espuma un poderoso fanal de luces,

furiosas olas que rompen furiosas en esa roca viva

que mantiene los viejos adobes de la torre esbelta,

envuelve con espuma mí poderosa luz que alumbra

el corazón de esperanza de los marineros de gleba.

 

Ese temporal se engrandece con el furor de viento

que empuja la pujanza del Océano hacia ese islote,

muchos nudos empujan con aire las soberbias olas

 ondulando las poderosas ondas de su mar violenta,

que destrozan sin clemencia ese marinero perdido

entre enérgicos remolinos de su ardorosa esencia.

 

Un airoso farero contempla desde el fanal las olas

que se estrella sin reposo contra su roca rica viva,

no presumas de oleaje turban de rabiosa tormenta

aunque encumbres tu espuma en soberana alzada,

horrorizando al afectivo farero que come de su luz

siendo hombre que en el faro del pavor se espanta.

 

La tempestad atronó los delicados oídos de sirenas

que vengan cuando la calma chicha entre las rocas,

alza tu usado cuerpo alumbrador de luces que guía

Neptuno pidiendo predestinación innova esa calma,

cuando sus moléculas de aire y agua dejen de rugir

arribaran tiempos del sosiego para el faro del agua.

 

El farero respira alegre viendo que el Mar se calma

ya están arribando los tiempos de pisar tierra seca,

gracias naturalezas con viento que podéis secarme

al ganar esa ardua borrasca del Océano que rompe,

ayudaste al marinero que surca los mares fragosos

 con la luz de un poderoso fanal que alumbra el Mar.

 

Autor:

Críspulo Cortés Cortés

El Hombre de la Rosa

10 de febrero de 2018