Como los copos de nieve.
Se derriten en la tierra.
Así, se marchan los besos.
Lentos se van alejando,
como al viento las pavesas.
A la memoria se aferran.
Pero su sabor se pierde.
Como se aleja la arena,
cuando el agua se la lleva.
Más el recuerdo florece.
El pasado lo devuelve.
Y afloran a la memoria.
Los que olvidarse no puede.
Los que forjados a fuego,
vívidos quedan latentes.
Pero van quedando atrás,
debatiéndose en el éter.
Gotas de lluvia que caen.
De ríos mares y lagos.
Lágrimas enamoradas,
tras los cristales soñando.
Gota a gota se recrean,
los momentos añorados.
Cada gota, es aquel beso,
en el corazón grabado.
Suspiro a suspiro flotan.
Como navegan los barcos,
por el agua sustentados.
Ávida la tierra abraza,
la vida que va llegando.
Y beso a beso de lluvia.
Sus hijos alimentando.
En cada gota un legado.
Un futuro de promesas,
para seguir caminando.
Idea a idea se construye.
A golpes de corazón.
Torrentes de inteligencia.
Voces dando a la razón.
La verdad de su existencia.
El agua no se diluye.
A la vida representa.
El ser fenece sin ella.
Cada gota es un tesoro.
La Madre Naturaleza.
A. L.
http://alupego.blogspot.es/2