Rabias tremendas dominan
a pueblos valientes que son explotados,
siempre su fe la encaminan
llena de sueños preciados,
buscando los puertos con paz adornados.
Vuelan con alas de gloria
aquellos que buscan la santa justicia,
llevan pendones de historia
llenos de sangre patricia,
que vierten sus almas en cantos de albricia.
cuando perversos tiranos
se ponen soberbios con tal dictadura,
hombres con pechos troyanos
y alma gigante tan pura,
ofrecen al pueblo su noble armadura.
Sueño dorado es la paz,
que anhelan los pobres que son sometidos,
Traen su fuerza feroz
hombres que son aguerridos,
y dejan ejemplos de triunfos prendidos,
Siempre debemos mirar
las águilas, cuando levantan su vuelo,
nunca las van apresar
y surcan libres el cielo,
llevando en sus alas la luz del anhelo.